Donald Trump ha elegido al que será su embajador en España. Se trata de Benjamín León Jr, un empresario cubanoamericano de 80 años, según anunció el presidente electo este jueves a través de Truth, su red social. León es un donante del Partido Republicano y un apasionado de la hípica. Será embajador en Madrid en un momento en que la Unión Europea aguarda con preocupación la vuelta de Trump a la Casa Blanca ante la amenaza de imposición de aranceles y la posibilidad de un cambio en su política exterior con respecto a Ucrania y la OTAN, aspectos que pueden condicionar la relación trasatlántica.
El puesto de embajador estadounidense en España está vacante desde que en julio lo dejase Julissa Reynoso para reincorporarse al despacho de abogados Winston & Strawn como socia dedicada especialmente a asuntos trasnacionales. El nombramiento de León está sujeto a la confirmación del Senado, pero el candidato propuesto por Trump no debería tener ningún problema para lograr la luz verde.
El Gobierno de Pedro Sánchez ha tenido una relación fluida con la Administración Biden. El presidente del Gobierno español visitó la Casa Blanca en mayo de 2023. Joe Biden estuvo en La Moncloa antes, en junio de 2022, con motivo de la cumbre de la OTAN celebrada en Madrid. Los aranceles a la aceituna ―impuestos por Trump, pero que Biden ha mantenido en gran medida― y, más recientemente, la amenaza de sanciones a España por vetar la escala de buques con armas para Israel, apenas han empañado una relación bilateral amistosa y que ha permitido acuerdos en diversas materias. El debate sobre el gasto militar de los países miembros de la OTAN, en que tanto insiste Trump, y los posibles nuevos aranceles pueden convertirse en motivos de fricción en la nueva etapa.
“Benjamín es un empresario de gran éxito, aficionado a la hípica y filántropo. Llegó a Estados Unidos desde la Cuba comunista a los 16 años, con solo cinco dólares en el bolsillo, y construyó su empresa, Leon Medical Facilities, hasta convertirla en un negocio increíble”, escribió Trump. La historia empresarial de León es un poco más compleja que eso.
León nació en Oriente (Cuba), en 1944. Su familia emigró de la isla en 1961, tras la Revolución Cubana. Benjamín León Jr llegó a Miami con 16 años, seguido de sus padres y su hermano ese mismo año. Empezó lavando platos en el lodge Shelborne, trabajó como repartidor de periódicos para el Miami Herald y también reponiendo estantes en tiendas de comestibles, según los perfiles que se han publicado sobre él.
En aquella época había una gran afluencia de inmigrantes cubanos que entraban en Miami. Muchos de los inmigrantes tenían dificultades para acceder a la atención médica debido a las barreras lingüísticas y a un sistema de prestación de asistencia sanitaria desbordado en el condado. Por ello, Benjamín León padre, junto con Moisés Liber, y un grupo de médicos y profesionales fundaron en 1964 el primer centro médico de prepago de Miami, Clínica Cubana. Benjamín León Jr se unió a la empresa como el primer director de servicios al afiliado.
Posteriormente, padre e hijo fundaron la Clínica Asociación Cubana (CAC) en junio de 1970, que en 1973 recibió la primera licencia de Organización de Gestión Sanitaria (HMO) de Florida, que proporciona un tipo de seguro médico que suele limitar la cobertura a la atención prestada por médicos que trabajan para la HMO o tienen un contrato con ella. Por lo common, no cubre la atención fuera de la crimson, salvo en caso de urgencia. La familia León vendió la firma al gigante UnitedHealthCare en 1994 por unos 500 millones de dólares.
Benjamín León Jr. fundó en 1996 Leon Medical Facilities (LMC), que presta sus servicios a los beneficiarios de Medicare, el seguro sanitario público, dirigido principalmente a personas mayores, y más adelante, Leon Medical Facilities Well being Plans. La empresa está en la actualidad dirigida por su hijo, Benjamín León III. El grupo cuenta con 2.300 profesionales y presta atención a más de 44.000 beneficiarios de Medicare, principalmente en el área de Miami-Dade. La familia también tiene inversiones inmobiliarias.
Pasión ecuestre
En paralelo a su carrera empresarial, el que será embajador en España se ha volcado con su gran pasión, la hípica. En la década de 1980, fundó la cuadra Besilu, que destacó en la crianza de caballos de Paso Fino. En 2008, compró su primer pura sangre inglés (Thoroughbred), empezó a participar en carreras de caballos y a gastarse decenas de millones de dólares en las subastas de equinos. En 2011, compró la yegua Royal Delta por 8,5 millones de dólares, que ganó carreras de prestigio e hizo que León se convirtiese en un personaje ordinary de las publicaciones especializadas. Empezó a criar pura sangres en su cuadra.
“Me encantan los caballos. Disfruto con los caballos. Me encanta criar caballos e intentar criar un gran caballo es lo que más me motiva”, declaraba en 2012 en una entrevista publicada por ESPN. “Aun así, soy muy consciente de la realidad de este deporte. Vas a perder mucho más de lo que vas a ganar, y tener éxito es un reto”, añadía.
Junto a las empresas y la hípica, León ha dedicado parte de su patrimonio a la filantropía. “Ha ayudado a apoyar muchas causas nobles, como La Liga Contra el Cáncer, e importantes investigaciones médicas en Johns Hopkins y el Instituto del Cáncer Dana-Farber”, destacó Trump en su mensaje de Reality. Apoyó la Escuela de Enfermería Benjamín León Jr. del Miami-Dade School. En 2008, donó 10 millones de dólares para crear el Centro Acquainted de Investigación y Educación Geriátrica de la Universidad Internacional de Florida, a la que ha seguido haciendo aportaciones. Este mismo año, donó 10 millones de dólares a FIU CasaCuba, un centro cultural y académico cubano que facilita el debate y el estudio de los asuntos cubanos en dicha universidad, para ayudar a construir su nueva sede.
Lo que no citaba Trump en su mensaje en la crimson social es algo que sirve como ordinary tarjeta de presentación para optar al cargo de embajador de Estados Unidos. León es donante de candidatos del Partido Republicano y, en explicit, del que será su jefe directo, el secretario de Estado, Marco Rubio, también de origen cubano. Curiosamente, aportó 2,5 millones en 2015 a la campaña del senador, que por entonces tenía como rival en las primarias presidenciales republicanas al propio Trump.