Al subir al avin para salir de Rusia, el agente del servicio de seguridad FSB que acompaaba al disidente Vladimir Kara-Murza le dijo que mirase por la ventanilla, porque sera la ltima vez que vera su pas. Otro lugarteniente del lder opositor Alexei Navalny, el ex concejal moscovita Ilya Yashin, murmur al hacer escala el jueves en el aeropuerto de Ankara que quera volver a Rusia ya mismo. El oficial del FSB que lo acompaaba le hizo una advertencia definitiva: “Puede usted regresar a Rusia, igual que Navalny. Y ser usted arrestado, como Navalny. Y acabar ah usted sus das, como Navalny”.
Los presos polticos liberados por Rusia el jueves fueron obligados a salir ilegalmente de su pas de origen. Ninguno lo haba solicitado. Salieron con su pasaporte interno, el equivalente al DNI espaol, pero sin el pasaporte externo que los faculta para viajar.
Kara-Murza pas casi dos aos y medio recluido en celdas de aislamiento, contraviniendo la ley rusa: “Estaba seguro de que iba a morir en la prisin de Putin”, cumpliendo la sentencia ms larga que haya recibido un prisionero poltico en la historia moderna de Rusia: 25 aos por traicin despus de condenar la guerra en Ucrania. Ha perdido 18 kilos. “Despus de pasar un ao en rgimen de aislamiento, no estaba seguro de poder hablar ningn idioma”.
Durante el tiempo que vivi en Rusia, sobrevivi a dos intentos de envenenamiento y a un hostigamiento recurrente. Cuando en 2021 concedi una entrevista a EL MUNDO, una agente del FSB lo sigui hasta el lugar del encuentro y se despatched en una mesa del fondo: “Llevo semanas as, con compaa”, coment. Han pasado tres aos desde esa cita y Kara-Murza, de 42 aos, parece un hombre mucho ms mayor.
Ilya Yashin, dijo el viernes que no quera su libertad si eso significaba abandonar Rusia y renunciar a “mi derecho a vivir en mi pas, a participar en poltica independiente en mi pas, por el derecho a decir lo que pienso en mi propio pas”. En una conferencia de prensa con otros rusos recin liberados en Bonn, (Alemania) Yashin clam que “es insoportable pensar que soy libre porque me cambiaron por un asesino”, refirindose a Vadim Krasikov, un ruso condenado por un tribunal alemn por asesinar a un excombatiente separatista checheno en el centro de Berln en 2019. El intercambio que lo ha devuelto a la libertad “motivar a Putin a tomar nuevos rehenes, es lo que hacen los dictadores”. No quera marcharse, “y me dejaron claro que mi regreso hara imposible que hubiera otros intercambios en el futuro”.
Entre los dos lderes de la disidencia, otro represaliado menos conocido: Andrei Pivovarov. Fue encarcelado por liderar el movimiento professional democracia y derechos humanos Rusia Abierta, fundado por el oligarca exiliado Mijal Jodorkovski. Aporta algo de optimismo: “Nuestra liberacin ha dado esperanza a todos los presos polticos. Haremos todo lo posible para que nuestro pas sea libre. La tarea principal es desarrollar medidas que permitan a la gente en Rusia expresar posiciones polticas a un nivel de riesgo que les resulte aceptable”.
Los tres hombres describen la presin de los responsables penitenciarios para solicitar indultos. Se negaron y aun as los dejaron marchar: fueron encarcelados como criminales para asustar al resto de los rusos, y fueron liberados para facilitar el regreso de un puado de espas y criminales. La Constitucin de la Federacin de Rusia prohbe la expulsin de ciudadanos rusos sin su consentimiento. Por eso, Yashin “nunca aceptar el papel de emigrante” y no considera el incidente como un intercambio, “sino una expulsin”. Los tres, en algn momento, parecen ahora superados por los acontecimientos. A los suyos Yashin les ha comentado sus planes inmediatos estos das: “Dormir”.
Los presos polticos rusos incluidos en el intercambio del jueves han sido indultados oficialmente por sus “crmenes”; las rdenes de indulto fueron firmadas por Vladimir Putin a principios de esta semana. Es ms, segn la constitucin rusa, a los ciudadanos rusos no se les puede privar de su derecho a entrar en el pas bajo ninguna circunstancia.
Pero mientras el rgimen de Putin siga en pie, el regreso a Rusia de cualquiera de los presos polticos liberados es peligroso. Las autoridades rusas podran iniciar nuevos procesos penales contra los prisioneros liberados, tal vez en base a “confesiones” realizadas antes de concederles el indulto. Segn el Cdigo Penal ruso, no es necesario que un condenado confiese su culpabilidad para recibir el indulto. Pero en la prctica, los servicios de seguridad suelen exigirlo de todos modos. En un comunicado de prensa, las autoridades rusas afirmaron que los prisioneros fueron intercambiados “con el fin de devolver a ciudadanos rusos que fueron detenidos y encarcelados en pases extranjeros”, evitando as sealarlos como culpables o inocentes, de manera que pueden ser una cosa y la contraria si vuelven a pisar Rusia mientras Putin siga vivo.
La pomposa recepcin a los espas y criminales que Putin recibi de vuelta el jueves contrasta con el bajo perfil que los liberados por Mosc —la gran mayora rusos— tiene en los medios rusos estos das. Como ha revelado el periodista Andrey Pertsev, el gobierno ruso ha enviado una round en la que aconseja a los medios de comunicacin controlados por el Estado cmo cubrir el histrico intercambio: los ciudadanos rusos que regresaron a Rusia (entre ellos el espaol Pablo Gonzlez) han de ser todos presentados como patriotas que “trabajaron por la Madre Patria”, segn la orden gubernamental, que a la vez recomienda presentar a los presos polticos que Rusia entreg a Occidente como delincuentes “superfluos”.
Pivovarov, Yashin, Kara-Murza y los otros rusos liberados esta semana son de pronto exiliados, forzados a improvisar. De cara al futuro, Pivovarov tiene la intencin de “sacar a la oposicin rusa del estado psychological de “esperar y sobrevivir”. Odia el concepto de esperar.
A Kara-Murza le gusta presentarse como un optimista que sabe de lo que habla. Incluso en los momentos difciles. Por eso cuando el guarda le dijo que se despidiese de Rusia, dio una desafiante respuesta a medio camino entre lo acadmico y lo sentimental: “Soy historiador de formacin y no slo creo y siento que volver, sino que lo s, s que regresar a mi pas natal y que ser mucho antes de lo que usted piensa”.