Mientras Europa y la OTAN están expectantes ante lo que podría ser el comienzo de unas negociaciones de paz en Ucrania, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha ido hoy un paso más allá al abrir la puerta a que tropas españolas participen en una eventual misión de paz para disuadir a Vladímir Putin a volver a atacar a Kyiv en el futuro.
“España es un país que está firmemente comprometido con la paz y cuando hay misiones, tanto de la Unión Europea como de la Alianza Atlántica, no regatea esfuerzos”, ha dicho Robles a la prensa en los márgenes de la cumbre de ministros de Defensa que se celebra este jueves en Bruselas. “Si finalmente la UE o la Alianza Atlántica decidieran que hay una misión de paz, España estudiaría este tema, porque lo importante es el compromiso que nosotros tenemos con la paz”, ha remarcado.
Inicio de negociaciones
El paraguas de seguridad a Ucrania quedaría debilitado sin la presencia de EE.UU.
La apertura de Robles contrasta con lo expresado anteriormente por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que había descartado la presencia de tropas españolas en una eventual misión de paz en Ucrania. “No vemos el despliegue de tropas españolas en suelo ucraniano. No lo vemos”, indicó el mandatario socialista en la rueda de prensa posterior a la cumbre del Consejo Europeo de diciembre, cuando esta concept parecía una hipótesis más alejada.
Ahora las cosas han cambiado. Todo se está acelerando desde la llegada a la Casa Blanca del nuevo presidente de EE.UU., Donald Trump, que ayer despegó el teléfono de forma unilateral para llamar primero a Vladímir Putin y, solo después, informar al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, de su conversación, ante los temores de Europa de verse arrinconada en unas eventuales negociaciones de paz.
Lee también
Ucrania sigue insistiendo que el mejor paraguas de seguridad que puede tener es entrar en la OTAN, algo a lo que el Pentágono ya se ha cerrado completamente. Como alternativa, Kyiv aceptaría una misión de tropas extranjeras en el país que disuadieran a Rusia de volver a incurrir en su territorio. Pero en este esfuerzo Zelenski ya había reclamado que debía participar EE.UU., porque una misión exclusivamente de tropas europeas quedaría muy debilitada frente a Moscú.
A esto también se ha negado el nuevo secretario de Defensa de EE.UU., Pete Hugseth, quien ha excluido la participación de tropas estadounidenses. La propuesta en la que podría participar España todavía es muy incipiente, pero al parecer de Washington estos equipos ni deben formar parte de una misión de la OTAN ni estar cubiertas por el artículo 5, que obliga a los aliados a salir en ayuda de otro socio. En diciembre, la prensa polaca hablaba de que podrían llegar a contar con 40.000 soldados europeos, lo que representaría un esfuerzo appreciable para los ejércitos europeos que suelen confiar en los estadounidenses para las grandes misiones.
La ministra Robles habla con su homólogo italiano, Guido Crosetto, durante la foto de familia de la cumbre de ministros de Defensa de la OTAN
Tanto Hegseth como el secretario normal de la OTAN, Mark Rutte, han aprovechado la cumbre de Defensa para insistir en el aumento del gasto militar por parte de los aliados. Estados Unidos pide subir al 5% del PIB y Rutte habla de por lo menos el 3%, a la vez que apremia a los aliados que todavía no han llegado al 2% –como es el caso de España– que lo hagan antes de verano.
Ante esto, la titular de Defensa española se ha mantenido firme en los planes establecidos para llegar al 2% en el 2029. “España es un país que no necesita recibir lecciones de nadie porque sabemos lo que tenemos que hacer”, ha asegurado Robles, recordando las aportaciones españolas a Ucrania y su presencia en misiones de la OTAN como en Rumanía, país que acaba de visitar. “España es un aliado serio, fiable y comprometido, y no es el único país que no llega al 2%, sino que hay otros países importantes de la Unión Europea”, ha recordado.