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La inmigración escala puestos en el índice de preocupaciones de los españoles mientras los albaceas del fascismo intentan conquistar Europa a caballo de este mismo tema. Tras el aumento registrado en la llegada de inmigrantes ilegales, hasta un 17% de los consultados por el CIS en julio mencionaban la inmigración como uno de los principales problemas de España y lo situaban en el cuarto puesto de las inquietudes ciudadanas, tras el desempleo o los problemas económicos. Se trata de la tasa más alta de los últimos 14 años. Y la lectura de este dato obliga a preguntarse si la extrema derecha española cuenta con opciones de hacerse con el mismo apoyo que sus homólogas francesa (el 30% de Marine Le Pen) o italiana (el 26% de Giorgia Meloni).