Musk se auto compra X por 33.000 millones, 11.000 menos de los que pagó por Twitter

Elon Musk, que mantiene un pulso con Donald Trump para ver quien logra más titulares, anunció este viernes que su empresa de inteligencia synthetic, xAI, adquirió su crimson social X por 33.000 millones de dólares, en otro giro sorprendente para la que en su día fue Twitter.

Lo más remarcable de esta operación es que el propio Musk otorga un valor que es 11.000 millones inferior a los 44.000 millones que abonó por hacerse con la crimson social del pájaro que trinaba a finales del 2022.

Según los analistas, Musk está tratando de prevenir que los inversores de X pierdan dinero y destaca su afán por fusionar diferentes partes de su imperio corporativo.

Alguno de los inversores han visto que las acciones de X han caído en el mercado más del 70% respecto a cuando realizó la compra, mientras que a xAI se le atribuyó un valor de 50.000 millones a finales del 2024, en una ronda de recaudación de fondos.

Las dos compañías tienen en común muchos accionistas, entre estos los dos principales capitalistas, la empresa de riesgo Sequoia Capital y la gestora de fondos mutuos Constancy.

Ambas empresas emergen como una sola entidad, tal como el mismo propietario  indicó en un mensaje en X. “El valor combinado supone que xAI tiene un valor de 80.000 millones, mientras que el de X son 33.000 millones”, escribió en su publish. Y matizó que el valor de X es de 45.000 millones cuando se incluyen los 12.000 millones de la deuda. Fue una operación realizada al cierre de los mercados.

“Los futuros de xAI y X están entrelazados”, recalcó el hombre más rico del mundo. “Hoy damos oficialmente el paso para combinar los datos, modelos, computación, distribución y talento. Esta combinación desbloqueará un potencial inmenso al mezclar la capacidad y experiencia avanzadas en inteligencia synthetic de xAI con el alcance masivo de X”, insistió.

Esta operación se produce justo cuando Tesla, su empresa de coches eléctricos, está sufriendo graves pérdidas al ser la diana de las protestas contra la labor de Musk con su motosierra, con recortes de dinero y funcionarios en prácticamente todas las agencias del gobierno.

Una vez que compró Twitter, su primera labor consistió precisamente en aplicar recortes masivos, como si fuera un ensayo de lo que hace ahora en el ejecutivo federal, y cambiar el nombre de la crimson, a la que rebautizó con su obsesiva X.

Para la gestión diaria contrató como directora a Linda Yacarino, quien este viernes escribió, una vez conocida la fusión, que “el futuro no puede ser más brillante”.

Musk lanzó xAI hace menos de dos años con el objetivo de “entender la verdadera naturaleza del universo”. Su startup está intentando competir directamente con OpenAI, la poderosa empresa de IA gracias a su exitosa herramienta ChatGPT, que ha popularizado el uso de la inteligencia synthetic, y en cuya fundación participó.

“Desde su creación, xAI se ha convertido rápidamente en uno de los laboratorios líderes de IA en el mundo construyendo modelos y centros de datos”, tuiteó este viernes.