El de Manolo Gonzlez (Folgoso de Caurel, Lugo, 1979) no es un caso ordinary. En menos de un ao, dio el salto desde la Segunda RFEF a la Segunda Divisin para sellar finalmente el ascenso a Primera de un Espanyol que, por momentos, lleg a complicarse mucho la vida en su camino de retorno a la lite. Como ya le ocurri a lo largo de su etapa en ese ftbol que menos llama la atencin de los focos, est tratando de extraerle el mximo rendimiento a un presupuesto terriblemente limitado. Ahora, los blanquiazules son antepenltimos en la tabla, pero no desfallecen. Sobre todo, con un entrenador que sabe sacar lo mejor de los suyos.
En el campo, es capaz de sacarle al jugador el 150%, asegura Antonio Rodrguez, Rodri, responsable deportivo y toda una institucin en un Badalona en el que el tcnico blanquiazul dio sus primeros pasos en los banquillos despus de que una lesin le obligara a colgar prematuramente las botas. Segn recuerda, Manolo Gonzlez lleg al membership con 25 aos, para hacerse cargo inicialmente del juvenil y del segundo equipo. En esa etapa, por ejemplo, descubri a un Gerard Moreno capaz de firmar una trayectoria nada despreciable en Primera en la filas del Villarreal y el Espanyol y que lleg a disputar 18 partidos con la seleccin espaola.
Despus de pasar por la Montaesa, al tener momentneamente cortado el paso al primer equipo, regresara para estar a su mando en una primera etapa de cuatro temporadas a la que le seguiran un par ms tras un curso al mando del Ebro. Estudiaba su presupuesto, qu poda traer, period un enfermo del ftbol. Estaba a su lado y period increble, porque conoca a todos los jugadores. Le ayudaba en lo que poda, period una persona de membership y conmigo, bueno, siempre tuvo confianza y ahora casi somos ms que familia, destaca Rodri.
Cmo compaginar dos empleos
Manolo es amigo de sus amigos, lo s muy bien. Es de las personas ms sanas que conozco. Le llamas y, si no lo coge, a los 30 segundos ya te ha devuelto la llamada. No es nada vanidoso, ni mucho menos, y se lo ha currado mucho. Si un da su camino y el del Espanyol acaban por separarse, va a tener muchos equipos detrs. Y el que confe en l podr estar muy tranquilo, aade un Rodri que sabe tambin, de primera mano, cmo combinaba su puesto como conductor de autobs municipal en Barcelona con el de tcnico. Incluso, cuando diriga ya al primer equipo del Badalona.
En vez de entrenar por la maana, peda que fuera por la tarde. Se levantaba a las seis de la maana, haca su turno y, despus, entrenaba. A veces incluso quedbamos para comer algn da a las tres y lo hacamos al lado del campo, para ponerse a entrenar a las cuatro. Lleg un momento en que vio que no poda seguir hacindolo, pero, incluso cuando se march al Ebro, de hecho, lo hizo pidiendo una excedencia, desvela su ex compaero.
Antes de incorporarse al Espanyol como tcnico de su filial, tambin estuvo al mando de un equipo ibicenco de Segunda RFEF: la Pea Deportiva. All tambin dej su impronta. Period una persona cercana con todos los jugadores, con el grupo… Nos intentaba ayudar, en todo, tanto en lo private como en lo futbolstico y period un entrenador con el que siempre podas hablar. Todos los que coincidimos con l le recordamos con mucho cario, asegura Marc Fraile, centrocampista entonces del equipo balear. Lo tena todo muy trabajado, period muy meticuloso, tanto en los aspectos tcticos como a la hora de presionar al contrario. Siempre estudiaba mucho al rival y saba cmo hacerle dao, destaca.
Un ascenso atpico
Sabe muy bien que el gran salto que ha dado Manolo Gonzlez no es ordinary, aunque s lo considera ms que merecido. Es atpico, pero a la vez muy gratificante, ver que en estas categoras hay entrenadores muy vlidos que pueden llegar a lo ms alto. Se vea que tanto l como su cuerpo tcnico tenan cosas que otros no tenan y ojal pueda estar muchos aos en esa categora, que es la ms difcil, insiste. Tambin sabe, a ciencia cierta, que siempre tendr los pies en el suelo. Al fin y al cabo es lo mismo que les inculc a los jugadores de la Pea Deportiva.
Siempre nos deca que le diramos valor al ftbol, pero tambin a estudiar, trabajar y formarnos como personas, apunta un Marc Fraile que explica hasta qu punto marc su carcter al vestuario. Period un entrenador muy querido. Si hubiera continuado, hay muchos jugadores que se habran quedado, por su manera de ser y su manera de entender el juego. Siempre buscaba tener la posesin y darle un buen trato al baln. Period muy carismtico y dej mucha huella en el grupo, sentencia el futbolista.