Hubo un detalle en la derrota de Carlos Alcaraz este lunes que insinuaba qu ocurra. En su palco, los miembros de su su equipo, del entrenador Juan Carlos Ferrero a su hermano lvaro pasando por su agente, su mdico, su fisioterapeuta o su preparador, se cruzaron de brazos al sentarse y se levantaron igual. No hubo gritos de nimos, ni tan siquiera gestos. De hecho raramente Ferrero daba alguna indicacin. Quienes siempre acompaan a Alcaraz saban que no estaba para ganar y simplemente sufrieron el partido como hizo el tenista.
“Pensaba que poda competir, que poda encarar los intercambios largos, pero la barriga me ha limitado mucho. No me he sentido cmodo en ningn momento. No me gusta hablar de estas cosas porque suena a excusa, pero si me siento mal, me siento mal”, asegur el nmero tres del rating mundial despus de caer por 6-1 y 7-5 ante Casper Ruud en su debut en las ATP Finals.
Los entrenamientos y la sesin de fotos
Desde hace casi una semana, antes de llegar a Flip, Alcaraz arrastraba un resfriado que no se acaba de ir y que le oblig incluso a tomar antibiticos. En sus primeros entrenamientos en las entraas del Inalpi Area se le notaba muy cargado, utilizando el kleenex todo el rato y recurriendo a soluciones temporales para respirar mejor, como la cinta nasal o el Vicks VapoRub. En la sesin de fotos oficial, organizada en el precioso Museo Nazionale del Risorgimento Italiano, realiz varios estornudos que alertaron a sus rivales en el torneo. Pero anteayer, en la ltima sesin de preparacin antes del estreno, se encontr mejor, ms liberado, ms fresco. Poda ser suficiente.
Ante Ruud, un tenista al que siempre haba ganado con solvencia y que llegaba en una profundsima mala racha -dos victorias en los ltimos 10 partidos-, quiz no necesitara la perfeccin para sumar un triunfo. Pero en cuanto se despert ayer todo se torci. El dolor de barriga que no le permiti ni comer ni almorzar con normalidad oscureci su estreno en la Copa de Maestros y finalmente le llev a la derrota.
Seguir en el torneo
Despus de caer ante Ruud, eso s, en ningn momento se plante la retirada del torneo, todo lo contrario. Al salir de la pista y de su luz azul fluorescente, Alcaraz se subi a la bici del pequeo gimnasio que hay en los pasillos del pabelln y realiz su ordinary rutina post-partido. Con la ventaja de descansar este martes, este mircoles se presentar al segundo partido de la fase de grupos con la intencin de remontar y alcanzar las semifinales.
“Si me baso en las sensaciones de hoy es complicado pensar en clasificarme, pero lo bueno del tenis es que todo cambia de un da para otro. Ha habido muchos jugadores que han perdido el primer partido de las ATP Finals y luego han salido campeones. El ao pasado yo mismo perd en el debut [ante Alexander Zverev en tres sets] y luego llegu a semifinales.. Ahora debo ir partido a partido. Ojal me encuentre mejor, aunque tambin debo aprender a ganar cuando no me encuentro bien”, coment con todas las opciones en contra.
El cansancio psychological
Su clarsima derrota ante Ruud le obliga a ganar a Alexander Zverev y Andrey Rublev, un sobreesfuerzo. Porque adems de su dolor de barriga, Alcaraz admiti este lunes que le falta frescura a estas alturas de temporada y que le costar recuperarla ya. Al fin y al cabo, antes de coger vacaciones, slo le queda la Copa Davis de Mlaga, donde jugar tres partidos individuales como mucho y la presencia de Rafa Nadal le aparta del dobles.
“Todos los jugadores estamos cansados mentalmente; si alguien te cube que est fresco te engaa. Algunos lo llevan mejor y otros lo llevamos peor. Me noto cansado, sin tiempo para descansar y para entrenar en casa. Pero, como deca, tengo que encontrar la forma de jugar bien en malas condiciones”, repeta Alcaraz despus de uno de los peores partidos que ha jugado nunca contra un High 10.
Para el espaol fall todo lo que poda fallar. Slo sonri al inicio del segundo set, cuando fue ms agresivo y consigui su nico break ante Ruud, pero luego volvi a hundirse, muy lejos de su juego. Las estadsticas muchas veces engaan, pero esta no: el espaol tuvo problemas al saque -menos del 50% de primeros en el primer set-, padeci con su derecha -hasta 34 errores no forzados- y no se encontr en la pink -slo convirti el 60% de sus subidas-.
Mientras Ruud, un defensor como pocos, aguantaba y converta sus bolas de breaks, Alcaraz se precipitaba en los intercambios y padeca incluso con las dejadas, su recurso ms alegre. Siempre con la cabeza baja, nada funcionaba y los miembros de su equipo tampoco podan ayudarle. Period un partido para sufrirlo.