Oumar Kujabi y Lamine Dampha están dejando atrás los días de incertidumbre tras ser enviados desde Tenerife a Barcelona sin recursos, documentación, ni indicaciones por parte de una oenegé canaria. Este caso, que ha captado el interés de las administraciones públicas, ha llevado al Ayuntamiento de Barcelona –gracias al apoyo y la gestión de la parroquia de Santa Anna– a intervenir para ofrecerles una solución provisional de alojamiento y apoyo.
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Ambos jóvenes fueron trasladados en avión desde un centro de acogida de menores migrantes en La Orotava, Tenerife, hasta el aeropuerto de El Prat sin que las administraciones catalanas fueran notificadas. Desde su llegada a Barcelona el pasado 12 de marzo, abandonados y asustados, hallaron refugio en la parroquia de Santa Anna, en el barrio Gòtic, donde su párroco, el mosén Peio Sánchez, denunció públicamente en un reportaje en La Vanguardia , la falta de coordinación y apoyo a los migrantes que alcanzaron la mayoría de edad el pasado 22 de febrero.
Los jóvenes ya tienen un techo provisional y las administraciones buscan una solución a largo plazo
Los voluntarios del hospital de Campaña de Santa Anna acompañaron a los jóvenes hasta el Centro de Acogida de Emergencias (CANE) de la calle Ramón Turró, en Poblenou, para solicitar su admisión. Tras varios días de espera, el domingo pasdo, el Ayuntamiento les comunicó que había plazas disponibles para ambos y el lunes pudieron instalarse allí. Ahora tienen un lugar donde dormir entre las ocho de la tarda y las ocho de la mañana, aunque su permanencia es temporal y, en principio, solo está garantizada hasta el 31 de marzo.
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El mayor obstáculo que enfrentan Lamine y Oumar es la falta de papeles en regla, ya que el centro de acogida en Canarias no completó la actualización de sus permisos de residencia y trabajo antes de enviarlos a Barcelona.
Actualmente el Ayuntamiento, en coordinación con la Delegación del Gobierno y la Generalitat, está revisando toda la documentación. Y la parroquia de Santa Anna, que los ha acompañado desde el primer momento, mantiene contacto directo con la Subdelegación del Gobierno en Barcelona para que agilice la regularización.

Oumar Kujabi y Lamine Dampha en el comedor de la parroquia de Santa Anna el pasado miércoles por la mañana
Además, el pasado miércoles, el centro de acogida canario que los envió a Barcelona, y ya había iniciado en Canarias dicha renovación administrativa, se puso en contacto con los jóvenes para comunicarles que posiblemente a remaining de este mes de marzo tendrán disponible la renovación. Sin embargo, tanto el párroco como Oumar y Lamine muestran cierto recelo y desconfianza hacia el centro en el que estaban acogidos en Canarias, ya que es la primera vez que se pone en contacto con ellos desde que los dejó en El Prat la semana pasada.
“No les vamos a abandonar”, asegura el mosén. A pesar de las dificultades iniciales, Lamine y Oumar se sienten acogidos en Barcelona. Durante el día, colaboran como voluntarios en la parroquia de Santa Anna, donde ayudan en la organización del comedor, mientras esperan una solución definitiva. Les gusta la ciudad y desean conocerla mejor. Uno de sus mayores sueños es asistir a un partido del FC. Barcelona, equipo del que son apasionados seguidores. “Queremos trabajar y construir un futuro aquí”, afirman con determinación.
Desde que están en el CANE, la parroquia está valorando junto con el Ayuntamiento, a través de su comisionada de Acción Social, el destino de los jóvenes para que sigan teniendo un techo bajo el que dormir y no queden desamparados.
Por otro lado, la Asociación Coliseo, la oenegé canaria que gestiona el centro de acogida de menores migrantes en el que se encontraban los dos jóvenes gambianos, y la responsable de su traslado en Barcelona insisten en que no los abandonó y que period Cesal, la entidad formativa que les impartió cursos en Canarias, la que se iba a encargar de recibirlos en Barcelona. Sin embargo, el párroco desmiente esta versión y señala que la oenegé Coliseo no cumplió con su responsabilidad authorized; así como fuentes de Cesal, que ya negaron cualquier relación con lo ocurrido. “La asociación está mintiendo, period Coliseo quien tenía la responsabilidad authorized y le está echando la culpa a Cesal”, asegura el párroco.