La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha certificado la “participación preeminente” del fiscal normal del Estado, Álvaro García Ortiz, en la decisión de reclamar información para elaborar una nota de prensa sobre unos contactos entre el abogado de la pareja de Isabel Díaz Ayuso y el fiscal que le investiga por fraude.
En un informe pericial, al que ha tenido acceso La Vanguardia, la Guardia Civil sostiene que el fiscal normal fue quien ordenó que el fiscal que investiga al empresario Alberto González Amador le facilitase, vía fiscal jefa de Madrid, todos los correos electrónicos que se intercambió con su abogado y en los que éste buscaba un acuerdo de conformidad para evitar ir a juicio por fraude fiscal.
La nota de prensa debía servir para frenar unos bulos que se estaban publicando en varios medios de comunicación, en lo que pretendían hacer ver una maniobra política en este asunto.
El Supremo investiga al fiscal normal por si pudo cometer un posible delito de revelación de secretos porque unas horas antes de hacerse pública la nota de prensa, varios medios publicaron la cadena completa de correos entre fiscal y abogado.
Lo que investiga el magistrado Ángel Hurtado es si estos correos pudieron ser filtrados por el máximo responsable de la Fiscalía, antes de publicarse la nota de prensa, que ya la Sala dijo que en ésta no se cometió revelación de secretos.
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La UCO ha analizado los dispositivos de la fiscal jefe de Madrid, Pilar Rodríguez, y ha concluido la posible participación de García. Por eso, reclama al juez que le permita iniciar el análisis de los dispositivos de García Ortiz, que ya fueron incautados pero estaban a la espera de su análisis, en función del resultado de este primer informe.
Hurtado ya les ha autorizado a iniciar el análisis pero solo acotado a los días previos y posteriores a la filtración, el pasado 12 de marzo. La UCO constata que desde que el fiscal normal tuvo acceso a toda la cadena de correos electrónicos entre el fiscal y el abogado hasta que seta información se filtró a una radio solo pasaron dos horas. Además, apunta a que a esos correos solo tuvieron acceso un número limitado de personas.
Por ahora, en el informe se recogen las llamadas y mensajes enviados desde varios miembros de la carrera fiscal sobre cómo frenar las noticias que entendían falsas y manipuladas del diario El Mundo. Todo lo que aparece son los contactos para elaborar la nota de prensa, que se publicó al día siguiente.
Sin embargo, los agentes creen que podrían salir de este grupo de personas la filtración que se hizo a otro medio la noche antes de publicarse la nota de prensa.
