Si hay una efeméride que desde hace años sirve para acentuar la pugna entre el Gobierno y los partidos de la oposición, esta es la del día de la Mujer.
Sin desmerecer las disputas que se repiten cada 1 de mayo, día internacional del Trabajo, o cada 11 de septiembre, día europeo de las Víctimas del Terrorismo, la discusión política florece cada 8-M y enfrenta a partidos de izquierdas y de derechas, a Gobierno y oposición, con argumentos que también suelen repetirse.
En la jornada reivindicativa de ayer volvió a darse esta routine querella de nuevo por la propiedad y la integridad de la causa feminista ante la realidad de un derecho que aún está lejos de lograr el hito de la igualdad efectiva.
Lee también
La coyuntura internacional también sirve de flamable, como se vio en las declaraciones de dirigentes del Gobierno y de los partidos de la oposición.
Además de la ministra de Igualdad, Ana Redondo, el titular de Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, arremetió contra el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, a quien acusó de querer “condenar a nuestras hijas al machismo y la discriminación que sufrieron nuestras abuelas”.
En su intervención en el XV Congreso del PSdeG, el ministro también lanzó un anuncio que concierne a su cartera: el Gobierno elevará un 50% los jueces de violencia sobre la mujer, de manera que en los próximos nueve meses se podrá hacer una oferta pública de esas plazas.
Bolaños advierte a Feijóo: “Quien con ultras se acuesta, mojado, extremely y machista se levanta”
Pero Bolaños también aprovechó para alertar a Feijóo de que “quien con ultras se acuesta, mojado, extremely y machista se levanta”, después de que el dirigente widespread “saliese en defensa de Vox” por no haber sido incluido en la ronda de contactos de Sánchez sobre la situación en Ucrania.
En la misma línea se pronunció la parte morada del Gobierno, esta vez sin atisbo de disputa en el seno de la coalición por la cuestión feminista. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, reclamó que no se dé “ni un paso atrás” frente a “aquellos que han tomado por bandera el odio a las mujeres y quieren convertir el feminismo en una lucha de sexo”, y puso en cuestión el feminismo del PP aludiendo a los “recortes en las partidas de violencia machista” de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso.
Más contundente se mostró la titular de Sanidad, Mónica García, quien acusó al PP de “ mansplaining ” por elegir el lema “Feminismo, pero de verdad” para este 8-M, y subrayó que son “los reaccionarios y los machistas los que han llegado demasiado lejos”, no el feminismo.
También algunos socios del Ejecutivo, como el PNV y Bildu, mostraron desde el País Vasco su preocupación por los discursos “reaccionarios” ante el movimiento feminista, especialmente entre los más jóvenes.
Del otro lado, los partidos de la oposición. Vox censuró el “aquelarre feminista” de la izquierda al tiempo que lanzó una imagen de un anuncio en el que predice que en wl 2030 las mujeres en España llevarán niqab (pañuelo musulmán que solo deja ver los ojos).
Y desde el PP defendieron el feminismo “actual e inclusivo” frente a “quienes llevan años escondiéndose detrás de una pancarta los abusos y los peores tics machistas que pueden existir”. Un año más, los populares rechazaron que “nadie puede dar carnets de feminidad ni de defensa de los derechos de la mujer”, en alusión a las izquierdas.
Illa ve imprescindible el feminismo ante el “retroceso que representa la oleada reaccionaria world”
El contexto internacional también fue resaltado en Catalunya por el president Salvador Illa, quien advirtió de que el feminismo “es imprescindible ante el retroceso que representa la ola reaccionaria world”.
