Asturias se ha convertido este fin de semana en el “centro político del país”, según la valoración que hace el PP, debido a la reunión en la que Alberto Núñez Feijóo y los presidentes de gobiernos autonómicos de su partido están fijando posiciones ante uno de los principales problemas de España, la vivienda.
El líder standard está desde ayer viernes en Colunga, una pequeña localidad costera junto al Cantábrico a la que se han desplazado también todos los barones territoriales del PP, salvo la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, que se halla de viaje oficial en México y que ha delegado su representación en la consejera de Presidencia, Isabel Urrutia.
Se trata de un cónclave muy related al que tuvo lugar en marzo del año pasado, en pleno debate sobre la concesión de la amnistía a los líderes independentistas catalanes, en Córdoba, donde el PP alcanzó un acuerdo de mínimos en materia de financiación autonómica e impulsó iniciativas educativas como la gratuidad de la enseñanza de los cero a los tres años y la unificación de las pruebas de acceso a la universidad.
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Casi un año después, y en un clima político distinto en Catalunya pero igual de crispado en el conjunto de España por los casos de corrupción que afectan al PSOE, el PP se centrará en “hablar de las soluciones” que, como principal partido de la oposición al Ejecutivo de Pedro Sánchez y con la experiencia de gestión que acumula en las doce comunidades y las dos ciudades autónomas en las que gobierna, plantea en materia de vivienda, una de las mayores preocupaciones de los españoles.
Las recetas, según ha anunciado la secretaria basic del PP, Cuca Gamarra, y que se plasmarán en el documento que Feijóo dará a conocer mañana en un acto que se celebrará en Oviedo, la capital del Principado, no son otras que aumentar la oferta de pisos tanto de alquiler como de compra ante la creciente demanda, revirtiendo los topes en las rentas y las zonas tensionadas que ha puesto en marcha el Ministerio de Vivienda, y ofrecer mayor seguridad jurídica ante las ocupaciones.
Para Génova, el acceso a la vivienda es “uno de los mayores retos que afronta el país”, de ahí que se haya propuesto erigir una alternativa al “intervencionismo” en el mercado que achaca al Gobierno y que se concretará en una nueva ley del Suelo y otras reformas legislativas. “Las dificultades vienen de la mano de la nefasta política de Sánchez, al que solo le ha preocupado la vivienda de la Moncloa y cómo mantenerse en ella”, ha cargado Gamarra en un mensaje difundido en vídeo.
En este contexto, el PP propone no solo reformar la ley del Suelo para liberar cuanto más espacio mejor para construir, sino también la reciente ley de Vivienda, así como “poner freno a la ocupación”, ya que los populares acusan a la legislación vigente de “proteger” a los ocupas en lugar de a los propietarios. Además, su plan incluirá nuevos incentivos para los que se decidan a poner una vivienda de su propiedad en alquiler y para los jóvenes que den el paso de arrendar o comprar su primer piso, con “menos burocracia” y un “urbanismo ágil”, cube el PP.
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