En La montaa mgica, una de las obras ms importantes de la literatura alemana y europea, Thomas Mann relata la rutina de unos pacientes aquejados de afecciones respiratorias que van a tratarse a un hospital emplazado a casi 2.000 metros de altitud, entre las afiladas cumbres de los Alpes suizos. Los beneficios de la montaa, el respirar aire puro y la prctica de ejercicio en la naturaleza, junto con una nutricin adecuada, se consideraban a finales del S. XIX y principios del XX el mejor tratamiento frente a las enfermedades pulmonares.
La construccin de estos hospitales-balnearios, levantados en altitud y lejos de los ncleos urbanos, prolifer en las primeras dcadas del siglo XX, hasta que se encontr el antibitico capaz de combatir al mycobacterium tuberculosis o bacilo de Koch (llamado as en honor del mdico Robert Koch, quien descubri en 1882 que esta micro organism causaba la tuberculosis). El 18 de julio de 1921, un beb recin nacido recibi en Pars la primera dosis de una vacuna pionera contra la enfermedad, desarrollada por los cientficos Albert Calmette y Camille Gurin. El tratamiento mdico se fue desarrollando, y a partir de ese momento comenz el desuso y la decadencia de esos hospitales de montaa, por lo normal edificios dotados de todos los lujos y medios para tratar la enfermedad y para disfrute de sus acaudalados pacientes, ya que eran una opcin en ese momento accesible solo para las clases altas y adineradas.
Fue un visto y no visto, pero en nuestra sierra, en concreto en el valle de La Barranca, tambin tuvimos nuestra propia montaa mgica: el Actual Sanatorio de Guadarrama, levantado en una amplia explanada a ms de 1.700 metros de altitud, entre bosques de pinos y con maravillosas vistas a las cimas del Alto de Guarramillas (Bola del Mundo) y La Maliciosa. El 8 de agosto de 1914 se puso la primera piedra de este edificio de estilo modernista, diseado por el arquitecto Alfredo Echegaray y Romea, e impulsado por el mdico, dibujante y periodista Eduardo Gmez Gereda. Tres aos despus, en febrero de 1917, estaban terminadas sus cinco imponentes plantas y sus ochenta metros de fachada orientada al sur, que se jactaba de tener ms horas de sol que cualquiera de sus homlogos de los Alpes.
Una de las vistas de la ruta.
Al acto de inauguracin del flamante edificio, el primer sanatorio para el tratamiento de la tuberculosis construido en Espaa, acudieron los reyes Alfonso XIII y su esposa Mara Victoria, y por supuesto, toda la comunidad cientfica del momento. El precio de las habitaciones estaba entre las 3,50 y 18 pesetas por da, adems de 12,50 de la pensin y el tratamiento mdico. El agua que regaba y llegaba al Actual Sanatorio proceda del Alto de las Guarramillas, del mismo nacimiento del ro Manzanares, en el Ventisquero de la Condesa, y se conduca desde la Bola del Mundo hasta el sanatorio a lo largo de 4 kilmetros a travs de unas tuberas que an se pueden ver, y que ha acabado bautizando a este fashionable tramo de la sierra madrilea que va desde el Mirador de las Canchas hasta el Alto de Guarramillas.
El Actual sanatorio funcion hasta los aos sesenta y fue demolido en 1994, pero, aunque ya no quede ningn vestigio de l, les proponemos trasladarse a principios del siglo XX e imaginar que hacen una visita a sus pacientes, como Hans Castorp, el protagonista de La Montaa Mgica, a travs de una ruta round que nos regala vistas espectaculares del Valle de La Barranca y el cordal de la Bola del Mundo y Maliciosa. El itinerario sale del parking de La Barranca y va subiendo paulatinamente por una pista forestal entre enormes pinos, paralela al curso del ro Navacerrada. Seguimos por la pista, y en una nueva curva pronunciada a la izquierda, veremos el inicio de la Senda Ortiz, que alcanza la explanada donde se asentaba el Actual sanatorio.
Salimos de la amplia pradera a coger de nuevo la pista forestal que sigue ascendiendo hasta llegar al Mirador de las Canchas. Justo enfrente de los paneles indicativos del mirador, cruzando la pista forestal, hay un poste de madera que indica varias rutas, entre ellas, la nuestra: el Camino de las Tuberas. Nos internamos en este sendero tcnico, y pronto veremos los restos de las antiguas tuberas. El camino no tiene prdida hasta llegar a una curva pronunciada a la izquierda que salva el ltimo tramo de desnivel hasta Las Cabrillas. Podemos seguir subiendo si tenemos fuerzas y ganas al Alto de Guarramillas o Bola del Mundo. El regreso se realiza por el Camino de las Tuberas de nuevo hasta el mirador de las Canchas, y desde aqu, podemos tomar otra vez la Senda Ortiz o bien, y ms cmodamente, descender por la pista forestal, completando as esta saludable ruta round por la montaa mgica. Y es que no hay que estar enfermo para recibir los beneficios de la sierra: respirar aire puro, sumergirnos en la naturaleza y desconectar del estrs del da a da.