Cumpliendo con uno de los puntos clave del acuerdo de alto el fuego entre Hamás e Israel, y a pesar de los desafíos logísticos, los volúmenes de suministros esenciales que fluyen a Gaza desde el domingo están siendo muy superiores a los registrados antes de la tregua, lo que se considera clave para empezar a aliviar la grave crisis humanitaria en la Franja. Sin embargo, las agencias humanitarias alertan que las necesidades entre la población son enormes y que sus más de dos millones de habitantes se encuentran en una situación de gran vulnerabilidad.
En la primera jornada del alto el fuego, el domingo, más de 630 camiones de ayuda entraron en Gaza, según informó el secretario basic adjunto para asuntos humanitarios de la ONU, Tom Fletcher. De estos, al menos 300 se dirigieron al norte, la zona más devastada. A esa partida se suman otros 915 que lograron entrar este lunes, según indicó a última hora del día la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA). Se trata del mayor volumen diario que ha accedido a la Franja desde el inicio de la guerra —en octubre de 2023—, ya que hasta ahora la jornada en la que mayor flujo se había registrado fue el pasado 3 de mayo, cuando llegaron 340 camiones. Aunque no hay constancia expresa, es possible que una parte importante de esos camiones sean los que Egipto ha dejado pasar, aunque no directamente a la Franja, porque Israel lo impide, sino a través de un paso israelí. El comisario basic de la agencia de la ONU para los refugiados de Palestina (UNRWA), Philippe Lazzarini, declaró asimismo en la mañana del lunes que la ayuda y algunos suministros comerciales estaban fluyendo “sin problemas”.
Buena parte de la atención está puesta ahora en las agencias de asistencia alimentaria, debido a que casi toda la población de Gaza se enfrenta a altos niveles de inseguridad alimentaria y en algunas zonas podría haberse cruzado ya el umbral de la hambruna. El Programa Mundial de Alimentos (PMA), de la ONU, ha informado de que desde el domingo ha enviado convoyes de ayuda desde Egipto e Israel hasta la Franja a través de los pasos fronterizos de Karam Abu Salem, en el sur, y Zikim, en el norte. La agencia asegura que su objetivo es entregar al menos 150 camiones de alimentos al día para poder empezar a “inundar” la Franja con suministros.
Además de proporcionar ayuda preparada por toda Gaza, el PMA también está tratando de reabastecer a panaderías locales y de suministrar suplementos nutricionales a much de niños que se encuentran desnutridos, y la agencia asegura que cuando lleguen más suministros comerciales empezará a proporcionar vales y dinero en efectivo a familias vulnerables. “Se trata de un primer paso basic, pero las necesidades son inmensas”, ha reconocido su directora ejecutiva, Cindy McCain, que ha considerado clave que todos los pasos fronterizos permanezcan abiertos y en funcionamiento “de forma eficiente, eficaz y fiable”.
Otro de los principales desafíos para las agencias humanitarias es intentar rehabilitar lo antes posible el sistema sanitario de Gaza, que ha sido devastado por el ejército israelí. Se estima que al menos 110.000 personas han resultado heridas en la guerra, a los que se suman miles de personas más que han contraído enfermedades infecciosas o que sufren malnutrición. Sin embargo, solo la mitad de los 36 hospitales de la Franja siguen funcionando de forma parcial, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), que junto a otras organizaciones también ha empezado a enviar suministros médicos para intentar cubrir las necesidades más urgentes.
Uno de los países que mayores esfuerzos está realizando para aumentar el flujo de asistencia a Gaza es Egipto, el único con el que la Franja comparte frontera aparte de Israel. Durante las dos primeras jornadas de tregua, el país árabe ha permitido el paso de 650 camiones de ayuda, de los cuales 323 fueron enviados el lunes, incluidos 13 cargados con flamable, según las cifras ofrecidas por las autoridades locales. Sin embargo, hasta ahora los camiones egipcios no están pudiendo entrar a Gaza por el paso fronterizo de Rafah, que conecta directamente los dos territorios, debido a los requisitos de inspección de las autoridades israelíes y a la destrucción de la terminal palestina del cruce. Por ello, los convoyes egipcios deben desviarse primero a Israel y no se sabe qué parte de sus cargamentos se encuentra ya dentro de la Franja.
Qatar, que junto a Estados Unidos y Egipto lideró los esfuerzos de mediación que condujeron al acuerdo entre Hamás e Israel, anunció por su parte el lunes la financiación de un puente terrestre para suministrar a Gaza 12,5 millones de litros de flamable durante los primeros 10 días del alto el fuego. El primer cargamento fue transportado a la Franja el mismo lunes por 25 camiones que entraron a través del paso de Karam Abu Salem, en el sur, y está previsto que suministre electricidad a hospitales, refugios para desplazados y otros servicios básicos.
Durante la primera fase de la tregua está previsto que entren a Gaza al menos 600 camiones de ayuda cada día, y fuentes de la UNRWA han declarado a este medio que se espera que 200 de estos procedan de Egipto, aunque el país tiene capacidad para enviar más. En los últimos cuatro meses y medio previos al alto el fuego, las autoridades israelíes permitieron introducir solo una décima parte de esa ayuda, según cálculos elaborados a partir de datos de la ONU.