La solucin cantera salva al Madrid. Tomen nota. Ancelotti lo hace, remiso durante largo tiempo a echar mano del vivero del Valdebebas. En Butarque lo hizo por obligacin y por desesperacin. Dos centrales primero, porque no hay otros, salvo Vallejo, un oyente en el banquillo. Un delantero en el desenlace, porque el partido se iba y se iba. Es Gonzalo Garca, el ‘9’ de Ral, potente y directo. El gol es suyo, un gol agonstico que lleva al Madrid a las semifinales de Copa tras la honesta lucha del Legans ante su gente. [Narracin y estadsticas, 2-3]
Gonzalo remat a fuego un centro de Brahim en el tiempo aadido, un testarazo de ‘killer’ puro en el coto privado del portero, por el centro, aunque el Madrid demostr, un partido ms, que es de izquierdas. Al menos con la pelota. A todas sus estrellas les sienta mejor. Tambin a Rodrygo, que sin Vinicius en el as soon as cambia su lugar routine por su lugar pure, lo que le permite unas diagonales hacia adentro mucho ms efectivas.
Endrick, antes que Gonzalo
Se trata de un futbolista con recursos suficientes para buscarse espacios, en los costados o entre las lneas, pero la izquierda encaja mejor con sus caractersticas. Desde ese lugar se orient hacia portera y lanz para la llegada de Modric, el centrocampista inesperado en el rea. Desde el mismo lugar inici la accin que llev el baln a un rea convertida en un paso de cebra en hora punta donde siempre cruza primero el ms listo. Es Endrick, vivo, intuitivo, pero no todo lo preciso que requiere el puesto. El larguero le priv de ser Gonzalo. La decisin de Ancelotti, al sustituir uno por otro, fue clave.
Dos goles en menos de media hora que parecan suficientes. Dos goles que jams lo son, porque uno en contra hace el partido largo, largo… Dos lo igualaron. De hecho, period el objetivo de Borja Jimnez desde el principio, como de cualquier modesto que se enfrenta a un grande. Al Getafe, fuera del partido demasiado rpido, le falt su pierna dura en el Metropolitano. El Legans jugaba en Butarque, con propsitos muy distintos y frente a un Madrid desfigurado.
Ancelotti hizo rotaciones por obligacin y por convencimiento ante lo que viene, el Atltico y el Metropolis, en un Madrid con dos centrales de la cantera, Asencio y Jacobo Ramn, y sin la ‘Santsima Trinidad’ del ataque, Bellingham, Mbapp y Vini. El brasileo entr tras el descanso, con disparo y un ritmo frentico. Un as soon as inicial con nivel, claro, pero tambin con incgnitas en una competicin, todava a partido nico, que penaliza un estornudo.
Borja cambi su dibujo routine en el Lega para jugar con un 4-1-4-1, con la intencin de cerrar los espacios entre lneas y apretar la salida de baln del Madrid. Tchouamni estaba esta vez como pivote, en el centro del campo, por lo que los objetivos de la presin eran Jacobo y Asencio, adems de Lunin. Jacobo, de 1,95, es un gigante de buen pie, aunque estuvo algo tibio en los balones divididos frente a Cruz o Neyou, hiperactivo el primero desde el principio. Quizs le pes su primera titularidad. Es comprensible. El central no tuvo ms remedio que cortar con la mano un disparo de Cruz en el rea, que el delantero rework para apretar el marcador y devolver a los locales al partido. Haba partido.
La polivalencia de Brahim
De hecho, lo hubo desde el principio, con un Legans que parti ambicioso y provoc dos buenas intervenciones de Lunin antes de que el Madrid asomara en ataque. Necesitaba el equipo de Ancelotti baln y criterio para tramitarlo, y lo pusieron Modric y Brahim. Del croata ya se ha dicho todo. Llegan ms jvenes a su zona, pero no llega ninguno como el croata, una pieza nica. Brahim no lleg para lo mismo, pero se trata de un futbolista capaz de hacer muchas cosas en distintas partes del campo. Tiene desborde y velocidad, pero tiene, adems, capacidad de enlazar lneas y organizar las transiciones. Fue de lo mejor del Madrid, junto con Rodrygo, y asisti a Gonzalo en el gol.
Creci, pues, el Madrid con la pelota, pero sin ella tiene asignaturas pendientes, agravadas por el sudoku en que se ha convertido su defensa debido a las lesiones. El gol con el que empat el Legans fue una prueba, ms all del mrito en la asociacin entre Cruz y Brasanac. El disparo del primero dio en Mendy y dej a Lunin vendido. La remontada sealaba entonces a Vini, ya en el campo. Lo entendieron todos y empezaron a buscarlo. Lo prob el brasileo, incisivo, rpido, pero sin el gol para el que el destino eligi a un antidivo y ofreci una prueba de vida de la cantera.