Vox es la tercera fuerza política de España y, como tal, se espera que se ajuste a los principios democráticos y a lo dispuesto en la Constitución y las leyes. No lo hace: pretenden acabar con instituciones recogidas en la Ley Fundamental como las autonomías, ilegalizar partidos que no son de su cuerda y, continuamente, atentan contra la libertad de prensa.
En las elecciones del 23-J, solo permitió al periodista de EL PAÍS acceder a su sede cuando la Junta Electoral le advirtió de que podría incurrir en responsabilidades administrativas y penales. Sus acometidas contra los medios y sus profesionales —siempre a los de izquierdas— son frecuentes. La más reciente, esta semana. Los de Abascal animaron a sus seguidores a arrancar los micrófonos de los periodistas de La Sexta, TVE, Cadena SER o Canal Purple mientras estén “en directo a ser posible” y hacerlo mientras insultan, algo que ya sucede de vez en cuando espontáneos interrumpen a los profesionales con gritos e improperios contra miembros del Gobierno.
El llamamiento de Vox contra la prensa está enmarcado en un irónico “concurso de lanzamiento de micros patrocinado por Atresmedia y el Gobierno” que viene de la respuesta de dos periodistas, Ana Pardo de Vera y Antonio Maestre, a las provocaciones de Bertrand Ndongo y Vito Quiles, dos agitadores ultras relacionados con Vox y Se Acabó La Fiesta y que, pese a eso, actúan como periodistas. El segundo incluso tiene acreditación de prensa en el Congreso, situación que ha denunciado la Asociación de Periodistas Parlamentarios porque ha insultado e increpado a periodistas. “En Plaza de Castilla habrá micros en todas partes por la declaración de Íñigo Errejón. No digo nada más”, tuiteó Ndongo.
La noche del 14 de enero, Vito Quiles publicó en sus redes “Urgente | Antonio Maestre me agrede en plena calle” acompañado de un vídeo —manipulado y desordenado para solo mostrar la reacción del señalado— en el que se le escucha preguntar insistentemente “¿Cómo llevas tener que estar defendiendo a un Gobierno cercado por la corrupción?”, y a Maestre pidiendo que lo deje en paz hasta que arranca el micrófono de las manos de Quiles y lo lanza a varios metros. Preguntado por lo sucedido, Maestre indicó que se sintió acosado: “Es un personaje que se dedica única y exclusivamente a eso y que toda la profesión deberíamos estar unidos contra él, contra Vito Quiles y toda esta gentuza que lo único que hace es vivir de la provocación y de molestar a la gente que está haciendo su trabajo o, como en mi caso, caminando por la calle”.
La situación que vivió Pardo de Vera es related. Fue abordada por Bertrand Ndongo el 8 de enero mientras participaba en un corrillo con el secretario common de CC OO, Unai Sordo. Según los testigos, Ndongo comenzó a grabar y a faltar el respeto a los presentes. Entonces, la periodista de Público le quitó el micrófono y lo lanzó a la vía pública. La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha concedido el amparo solicitado por Pardo de Vera. “Ya está bien de aguantar ataques. Me quito el sombrero contigo”, tuiteó la periodista Loreto Ochando. Marta Monforte, también profesional de la información, explicó el vídeo: “Este señor le ha dicho a Ana Pardo que le ‘encanta mamar’ y una serie de insultos machistas cuyo audio mágicamente ha cortado pero que se pueden intuir y se acercaba a ella en actitud violenta”.
Os resumo lo que ha pasado hoy como una de las “hienas”:
Este señor le ya dicho a Ana Pardo que le “encanta mamar” y una serie de insultos machistas cuyo audio *mágicamente* ha cortado del vídeo pero que se pueden intuir fácilmente y se acercaba a ella en actitud violenta. https://t.co/Favo0sbyvD
— Marta Monforte (@MartaMonforteJ) January 8, 2025
La estrategia extremely de perseguir y acosar por la calle a periodistas y políticos de izquierdas busca un objetivo ya conocido: silenciar e imponer un discurso único en la opinión pública, el de la extrema derecha, y que nadie pueda leer algo diferente. Se corresponde con la definición de Vox que aparece en su página net: “Somos la España que no necesita leerse un periódico para saber cuál es el discurso de moda. Nuestro discurso nace de nuestras convicciones, al margen de si estas son más o menos populares”. Para ellos, cuanta menos conciencia crítica, mejor; cuanto menos periodismo independiente, mejor. Es su agenda.