¡Hola amigos! Hoy les traigo una historia muy divertida sobre travesuras entretenidas. ¿Están listos para reírse un rato?
Una vez, en un pequeño pueblo, un grupo de traviesos niños decidieron hacer una broma muy ingeniosa. Se escondieron detrás de los arbustos y comenzaron a asustar a la gente que pasaba por ahí. ¡Imagínense la cara de susto de los pobres transeúntes! Fue una tarde llena de risas y diversión.
Pero la travesura más épica de todas fue cuando los niños decidieron llenar las fuentes del parque con colorante de comida. ¡Imaginen la sorpresa de todos al ver el agua de colores! Fue una hazaña que nunca olvidarán.
Y ahora, para recordar una memoria famosa, quién no recuerda la vez que el payaso de la fiesta infantil se quedó dormido en plena actuación y los niños tuvieron que despertarlo con una lluvia de confeti. ¡Qué risa!
Así que ya saben, a veces las travesuras pueden ser la mejor forma de pasar el tiempo y crear recuerdos inolvidables. ¡Diviértanse y no dejen de hacer travesuras entretenidas!
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