Una vez aprobada definitivamente la ley de Eficiencia del Servicio Público de Justicia, en el último pleno del Congreso del 2024, Félix Bolaños mete la directa para lograr la luz verde a la reforma de la ley de Enjuiciamiento Legal (Lecrim) en el primer trimestre del 2025.
Se trata de una actualización de la vetusta norma en vigor desde 1882, que ya cuenta con el informe favorable por unanimidad del Consejo Common del Poder Judicial, y que no solo atribuirá a la Fiscalía la instrucción de las causas penales sino que además limitará el papel de las acusaciones populares, lo que mantiene en alerta a organizaciones ultraderechistas como Manos Limpias o Hazte Oír.
El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes defendió ayer esta reforma para que el enjuiciamiento legal en España “se adapte al signo de los tiempos”. Y recordó que la figura de la acusación well-liked está amparada por la Constitución, que remite la regulación de su “alcance” a la Lecrim. En este sentido, el ministro alegó que ahora “el espíritu de la figura de la acusación well-liked claramente se está pervirtiendo por las organizaciones ultraderechistas, a las que no les importa nada perseguir el delito y establecer los hechos”.
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Lo que buscan estas organizaciones ultras, a su juicio, es “perseguir a personas progresistas y a sus familias”, en alusión a las recurrentes querellas de Manos Limpias, Hazte Oír y organizaciones similares contra Pedro Sánchez, sus familiares y otros miembros del Gobierno y del PSOE. Bolaños, no obstante, no adelantó de qué manera se limitará la acusación well-liked: “Es un asunto que tenemos que analizar, y cuando tengamos respuesta lo explicaremos”.
El ministro aprovechó para criticar el steadiness del año del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo: “Es para echarse a llorar”. “Cero propuestas en positivo y miles de insinuaciones, falsedades, mentiras e insultos”, lamentó. Y metió el dedo en la llaga de los “líos internos de la derecha”, al advertir que Feijóo compitió con Isabel Díaz Ayuso “por ver quién hacía un steadiness más delirante, más extremista y alejado de la realidad”.
El ministro ironizó con el acercamiento de Feijóo a Junts, al asegurar que “dentro de algunos años el PP dirá que ellos fueron los autores de la ley de Amnistía y que ellos normalizaron la situación política, social e institucional en Catalunya”. “¿Cómo es posible que ahora el PP se siente con Junts para llegar a acuerdos, cuando hace cuatro meses decían que eran terroristas y que debían estar ilegalizados?”, requirió.
Bolaños, en todo caso, confió en una próxima “aplicación plena” de la ley de Amnistía, que todavía no alcanzó a Carles Puigdemont pese a beneficiar ya a “docenas de personas”. “La finalidad de la ley de Amnistía es clarísima, y espero que los recursos que se están presentando acaben dando lugar a su aplicación plena, que fue lo que decidió el Congreso”, zanjó.
El Govern se compromete con la ley de eficiencia
El conseller de Justícia i Qualitat Democràtica, Ramon Espadaler, se reunió ayer en Madrid con el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes Generales, Félix Bolaños, a quien trasladó el compromiso del Govern de implementar con celeridad la nueva ley Orgánica de Eficiencia del Servicio Público de la Justicia, recientemente aprobada por el Congreso y que entrará en vigor en enero. Este compromiso se concreta en el despliegue de los recursos materiales y humanos necesarios para la correcta implementación de la norma. En specific, Espadaler puso énfasis en la creación de los tribunales de instancia, en la Oficina Judicial, en la implementación de las oficinas municipales y en el refuerzo de la figura del juez de paz, y en la introducción de mecanismos alternativos de resolución de conflictos en los ámbitos civil y mercantil.
