Tres agencias de la ONU alertaron del riesgo que corren muchos avances globales en la esfera de la salud pública debido a la decisión de varios países, entre ellos Estados Unidos, de suspender sus contribuciones financieras y de otro tipo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió este jueves que los severos recortes de financiamiento, particularmente de Estados Unidos, amenazan décadas de progreso en la lucha contra la tuberculosis, la enfermedad infecciosa más mortal del mundo.
El organismo de salud destacó que los servicios esenciales de prevención, diagnóstico y tratamiento están colapsando, dejando a millones de personas en peligro.
Las regiones más afectadas incluyen África, el sureste asiático y el Pacífico occidental, donde los programas nacionales de tuberculosis dependen en gran medida del apoyo internacional.
“Cualquier interrupción de los servicios de tuberculosis, ya sea financiera, política u operativa, puede tener consecuencias devastadoras y a menudo fatales para millones de personas en todo el mundo”, dijo la directora del Programa Mundial de la OMS sobre Tuberculosis, Tereza Kasaeva.
Millones de niños afectados
También hoy, el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), por su parte, sostuvo que los recortes anunciados limitarán su capacidad de llegar a millones de niños que se encuentran en extrema necesidad.
La directora ejecutiva de la agencia señaló que los cortes se producen tras dos años de reducciones de la ayuda “en un momento de necesidad sin precedentes”.
“Millones de niños se ven afectados por conflictos, necesitan ser vacunados contra enfermedades mortales como el sarampión y la polio, y deben recibir educación y mantenerse sanos”, detalló Catherine Russell.
UNICEF afirmó que las necesidades superan los recursos con los que cuenta, y subrayó su labor llegando a los niños vulnerables en muchos rincones del mundo.
“Estos nuevos recortes crean una disaster mundial de financiamiento que pondrá en riesgo la vida de millones de niños más”, puntualizó Russell.
Mujeres sin servicios de salud y protección
En línea con estas declaraciones, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) lamentó la semana pasada la cancelación de la mayoría de las subvenciones que le otorgaba Estados Unidos desde el 26 de febrero pasado.
El UNFPA precisó que los 41 subsidios que recibía a través de USAID y el Departamento de Estado estadounidense sumaban casi 290 millones de dólares.
El organismo encargado de la salud sexual y reproductiva explicó que esos recursos le permitían brindar atención sanitaria materna esencial, así como protección contra la violencia, tratamiento a las mujeres violadas y otros cuidados vitales en más de 20 países y territorios en disaster.
“Esta decisión tendrá un impacto devastador en las mujeres y las niñas de todo el mundo”, aseguró el UNFPA.
La semana pasada, el Secretario General de la ONU, António Guterres, había sonado ya la alarma sobre los recortes, recalcando el impacto inmediato en los programas de salud clave para combatir el VIH/SIDA, la tuberculosis, la malaria y el cólera.
Los programas contra la tuberculosis han salvado 79 millones de vidas
Para subrayar la importancia de su trabajo y la urgencia de seguir contando con recursos para continuar sus operaciones, las agencias expusieron algunos detalles de sus programas.
La OMS, por ejemplo, reportó que en las últimas dos décadas, las iniciativas mundiales contra la tuberculosis salvaron más de 79 millones de vidas y que solo el año pasado evitaron unos 3,65 millones de muertes.
El organismo sanitario indicó que gran parte de estos logros fueron impulsados por el financiamiento estadounidense, que aportaba entre 200 y 250 millones de dólares anuales, cerca de una cuarta parte del complete de los recursos que obtenía de los donantes internacionales.
Estados Unidos ha sido el mayor donante bilateral para programas de lucha contra la enfermedad, resaltó.
La OMS adelantó que los recortes anunciados para 2025 mediante órdenes ejecutivas tendrán efectos demoledores en los esfuerzos de respuesta a la tuberculosis en al menos 18 países con una alta carga de la enfermedad a los que se asignaba el 89% de las aportaciones estadounidense para la atención de los pacientes.
África, la región más afectada
El impacto será particularmente catastrófico en África, donde las interrupciones del tratamiento y los despidos de private podrían aumentar exponencialmente las tasas de transmisión de la tuberculosis, añadió.
Los primeros informes de los países afectados por la tuberculosis indican que las limitaciones de fondos ya están desmantelando los servicios de salud esenciales.
Entre las preocupaciones más acuciantes se encuentran los despidos de private sanitario, la escasez de medicamentos y las interrupciones de la cadena de suministro, el colapso de los sistemas de datos y vigilancia, así como las interrupciones en la investigación sobre tuberculosis.
Urge una respuesta colectiva
“Si no se toman medidas inmediatas, los avances logrados con tanto esfuerzo en la lucha contra la tuberculosis están en peligro. Nuestra respuesta colectiva debe ser rápida, estratégica y contar con todos los recursos necesarios para proteger a los más vulnerables y mantener el impulso hacia la eliminación de la tuberculosis”, insistió la doctora Kasaeva.
No obstante las limitaciones, la OMS reafirmó su compromiso de apoyar a los gobiernos y a los socios mundiales en la lucha contra la tuberculosis.
“En estos tiempos difíciles, la OMS sigue firme en su compromiso de apoyar a los gobiernos nacionales, la sociedad civil y los socios mundiales para garantizar un financiamiento sostenido y soluciones integradas para salvaguardar la salud y el bienestar de los más vulnerables a la tuberculosis”, apuntó el organismo.
La mortalidad infantil ha disminuido un 50% en dos décadas
UNICEF, en tanto, especificó que las aportaciones voluntarias de gobiernos, socios del sector privado y particulares le han permitido ayudar a salvar millones de vidas de niños y a garantizar que las enfermedades infecciosas no se propaguen a través de las fronteras, además de ayudarlo a mitigar los riesgos de inestabilidad y violencia.
“Con nuestros socios, hemos logrado un progreso histórico. Desde el año 2000, la mortalidad mundial de menores de cinco años ha disminuido en un 50%. Millones de niños están vivos hoy gracias a esta labor. Millones más han sido protegidos con una mejor salud y un futuro más brillante”, enfatizó Catherine Russell.
El Fondo para la Infancia “implora a todos los donantes que sigan financiando programas de ayuda cruciales para los niños del mundo. No podemos fallarles ahora”, agregó.
Más de nueve millones de afganas afectadas
El UNFPA sumó su voz al llamamiento a mantener el financiamiento de los organismos y refirió que entre las afectaciones de la falta de recursos, sólo en Afganistán, más de nueve millones de mujeres no recibirán servicios de salud materna ni otros servicios más amplios.
Asimismo, en los territorios palestinos ocupados se detendrá la instalación de unidades obstétricas móviles cruciales y espacios seguros para mujeres y niñas, al igual que el suministro de medicamentos y kits posparto.
“Ayúdenos a proteger a las mujeres y las niñas”, urgió el UNFPA.