La líder de Aliança Catalana, Sílvia Orriols, ha criticado con ironía el reciente acuerdo alcanzado entre Junts y el PSOE para la cesión de competencias en materia de inmigración a Catalunya. Según Orriols, este pacto supone un cambio meramente nominal, ya que, en la práctica, el management de la inmigración seguirá en manos del Partido Socialista, aunque ahora a través de su federación catalana, el PSC.
A través de mensajes en sus redes sociales, la alcaldesa de Ripoll se burló de la negociación llevada a cabo por Junts, asegurando que “ahora, las competencias en inmigración las tendrá el PSC en vez del PSOE, qué gran victoria, la de Junts”, rematando con un sarcástico “jugada maestra”.
El acuerdo alcanzado por Junts y el PSOE contempla la transferencia de competencias en materia de inmigración a Catalunya, en un intento de la formación independentista de demostrar avances en su objetivo de dotar a la Generalitat de mayores herramientas de autogobierno. Sin embargo, desde sectores críticos, como el de Orriols, se cuestiona si este traspaso supondrá un verdadero cambio en las políticas migratorias o si simplemente se trata de una cesión administrativa sin impacto actual.
Desde Junts han defendido que este es un paso más hacia la autodeterminación y que permitirá a Catalunya gestionar la inmigración de forma más ajustada a su realidad social y económica. Sin embargo, el hecho de que el PSC sea el partido que gobierna la Generalitat de Catalunya genera dudas entre sectores independentistas más radicales sobre si este traspaso traerá cambios significativos en las políticas actuales.
“Las competencias estas en inmigración que decís que habéis conseguido, pásamelas en mí…”, desafía Orriols
En sus declaraciones, Sílvia Orriols fue más allá y lanzó un desafío directo a Junts, instándolos a cederle a ella la gestión de las competencias en inmigración: “Las competencias estas en inmigración que decís que habéis conseguido, pasádmelas a mí”, dijo la líder de Aliança Catalana.
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Cabe recordar que Orriols, conocida por su discurso abiertamente islamófobo y contrario a la inmigración, ha vinculado en repetidas ocasiones la inmigración con problemas de seguridad en Catalunya. Su partido, Aliança Catalana, ha hecho de esta cuestión uno de sus ejes principales, defendiendo medidas más restrictivas y chocando frontalmente con otras fuerzas políticas.