Alberto Núñez Feijóo prosigue con su estrategia de acercamiento al empresariado catalán y este lunes cenó con lo que se conoce como el G-8 de las patronales catalanas. El encuentro, al que acudió con el presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, se inscribe en la agenda privada que va desarrollando el líder de los populares en prácticamente todas sus visitas a Catalunya, con especial énfasis en el acercamiento y el intercambio de análisis en materia de política económica con el empresariado.
Del grupo denominado G-8 asistieron Jaume Guardiola (Cercle d´Economia), Josep Santacreu (Cambra de Comerç de Barcelona), Ramon Agenjo (Barcelona International), Antoni Cañete (Pimec), Carles Puig de Travy (Col.legi d’Economistes de Catalunya) y Josep Mateu (RACC) . Feijóo, que esta semana está presentando su plan para “aliviar el infierno fiscal” de los autónomos en España, trasladó sus propuestas en materia de fiscalidad. Asimismo, se abordó el debate sobre la semana laboral de 37,5 horas -que impulsa la vicepresidenta Yolanda Díaz-, la financiación autonómica, las infraestructuras y la inmigración.
Feijóo y Alejandro Fernández buscan ampliar el crecimiento y protagonismo del PP en Catalunya con la mirada puesta en las generales
Al igual que en los encuentros que han celebrado Feijóo y Alejandro Fernández en los últimos meses con Foment del Treball y el Cercle d´Economia, hubo coincidencia en la mayoría de carpetas y diferencias en materias vinculadas con la financiación singular que impulsa el Govern de Salvador Illa. Diferencias que también se dan dentro del mismo G-8.
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El encuentro del presidente del PP se produjo en vísperas de su visita al Cellular World Congress de Barcelona y tres semanas después de que se reuniese en Lleida con la asociación de la Empresa Acquainted. Una estrategia de intensa presencia en Catalunya, tanto con agenda pública como privada, que se inscribe en la apuesta de los populares de buscar una mayor implantación y crecimiento en este territorio con la mirada puesta en unas futuras generales. El resultado en Catalunya, donde el PP considera que hay margen de crecimiento, es elementary para llegar al la Moncloa. Una línea de actuación en la que los populares buscan ser un actor dentro de la sociedad catalana.
