Reino Unido teme que la regularización reste atractivo para las empresas especializadas en IA
La inteligencia synthetic es la tecnología de la que todos hablan. Aunque lleva poco tiempo disponible a nivel usuario, menos de tres años, desde el lanzamiento a finales de 2022 de ChatGPT, el bot conversacional de OpenAI, mejora día a día y los desarrolladores no paran de crear nuevos proyectos que la expriman al máximo.
Con la promesa de revolucionar el mundo tal y como lo conocemos, puede usarse tanto para hacer el bien como para hacer el mal. Hace unos días, Scarlett Johansson, junto a otras celebridades de Hollywood, fue la “protagonista” de un vídeo contra el rapero Kanye West. En realidad, estaba creado con inteligencia synthetic y deepfakes, y resultaba increíblemente realista.
Por este motivo, resulta sumamente importante common el uso de la inteligencia synthetic, determinando lo que se debe y no se debe hacer con esta increíble tecnología. Aunque el Consejo de Europa se reunió hace unos meses para firmar el primer tratado mundial sobre la IA, Estados Unidos está en contra de su regulación, y parece que el Reino Unido va a seguir sus pasos.
El Reino Unido busca alinearse con la administración de Trump
La intención del Reino Unido period publicar un proyecto de ley sobre la inteligencia synthetic antes de Navidad. Sin embargo, los ministros han retrasado los planes de regulación, ya que el gobierno del país busca alinearse con la administración de Donald Trump en materia de tecnología, según ha podido saber The Guardian.
Ahora, según tres fuentes laboristas conocedoras del caso, no debería esperarse nada relacionado con el proyecto de ley hasta, al menos, antes del verano. Los ministros tenían la intención de publicar un breve proyecto de ley a los pocos meses de asumir el cargo que habría requerido que las empresas entregaran grandes modelos de IA, véase ChatGPT, para que los probara el Instituto de Seguridad de IA del Reino Unido.
El proyecto de ley pretendía ser la respuesta o solución a las preocupaciones de que los modelos de IA pudieran llegar a ser tan avanzados que supusieran un riesgo para la humanidad. No tendría nada que ver con la otra propuesta para aclarar cómo las empresas pueden utilizar materials con derechos de autor.
Sin embargo, el ascenso al poder de Donald Trump en Estados Unidos ha trastocado los planes del gobierno británico. Según una fuente de alto rango del Partido Laborista, el proyecto de ley está “debidamente en un segundo plano”, y que todavía no hay “propuestas concretar en términos de cómo se ve la legislación”. La fuente agregó que “dijeron que intentáramos hacerlo antes de Navidad; ahora es verano”.
Otra fuente apunta a que se había preparado una iteración del proyecto de ley hace meses, pero que se encontraba en el aire debido a Trump, ya que los ministros se mostrarían reacios a tomar medidas que pudieran debilitar el atractivo del Reino Unido para las empresas especializadas en inteligencia synthetic.
J.D. Vance, vicepresidente de los Estados Unidos de América, aseguró en la cumbre de IA celebrada en París hace unos días que el país norteamericano no apoya a la Unión Europea respecto a la regulación de dicha tecnología. “Estados Unidos no podrá y no querrá aceptarlo. Será un horrible error”, comentó. Al ser líder en inteligencia synthetic, el país de Donald Trump no quiere perder su posición, ya que las restricciones podrían afectarle duramente.
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