El baloncesto del Unicaja va de rock and roll, de un frenes tantas veces incontenible para el rival. Es como si Ibon Navarro inyectara adrenalina en sus pupilos, que slo sienten su plenitud al galope. Cuando se detienen, dejan de ser ellos, como si no se reconocieran en parado. Aguardan ya los malagueos rival en semifinales de Copa, el torneo que inaugur su tiempo de rebelda y xito hace dos aos en Badalona. Derrotaron a un Joventut que aguant lo que pudo con valenta, acierto y un esplndido Sam Dekker.
Para saber ms
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Elevar las expectativas tambin genera angustias. Todos sealan a Unicaja, la palabra favorito en su apellido, el nico capaz de discutir el binomio Madrid-Bara, y no por efecto sorpresa, sino por sus propios talentos. Gan la Supercopa, fue el mejor equipo de la primera vuelta, cuatro ttulos en dos aos… Pero tambin sabe lo que es fallar, como el ao pasado en su Copa del Carpena. O en las ltimas semifinales ACB contra el Murcia. La presin.
De ah su empeo, su salida poderosa (21-13), slo empaada por la falta de puntera, apenas dos triples en toda la primera mitad. Un hndicap que hizo despertar al Joventut cuando los verdinegros enhebraron cinco triples consecutivos al comienzo del segundo acto, cuando se pusieron por delante con el impulso de Dekker y la sabidura eterna de Tomic.
El descanso sirvi de toque de atencin para el Unicaja. Volvi a amanecer elctrico, una salida de vestuarios que fue un sopapo para el Joventut, un golpe en la mesa, incapaz la Penya de contener a un rival que ahora s acertaba desde el permetro, que no daba respiro con sus transiciones que parecen alocadas y sin sentido y, sin embargo, son parte de un plan perfectamente diseado. El plan del qumico Ibon.
Tyson Prez, agarrado por Dekker, en la lucha por un rebote.EFE
El primer demarraje (71-58) fue justo cuando Dekker se tuvo que ausentar por un golpe en la cabeza. El Joventut se tambaleaba como un pgil sonado. Al mnimo despiste tena a cinco tipos volando sobre sus cabezas, una canasta en contra en su casillero y una distancia que ya superaba la veintena. Cuando volvi de la cura su referente ya period demasiado tarde.
Como siempre ante Unicaja, no se trata de frenar a alguna de sus muchas estrellas. Suele ser un labor coral la suya. Esta vez fue Osetkowski el mejor (18 puntos, siete rebotes), pero otros cuatro ms superaron la decena -Tyson Prez, Taylor, Carter y Perry- y los 12 participantes anotaron, con el equipo en 100. Pero la aficin andaluza cantaba a Alberto Daz, el alma de la defensa, el capitn y el corazn. Y miraba al equipo, a sus tres prdidas (la mejor marca copera desde 1991) en toda la tarde en el Gran Canaria Enviornment (y una de ellas, la de la segunda mitad, por la antideportiva de Osetkowski). El que les quiera ganar va a tener que jugar muy bien. Hay veces que ni llegbamos a hacerles falta, elogi Dani Miret a un rival que fue un cicln en la segunda mitad.