La escena teatral barcelonesa está viviendo un buen momento con un buen número de musicales de éxito en cartel. Vuelo en tierra forma parte de esa categoría, pero se trata de una propuesta arriesgada y diferente. Un maridaje curioso y novedoso que mezcla las proporciones justas de teatro musical de pequeño formato, con gastronomía gourmand, arte olfativo, la buena música y la palabra. Si a todo eso le añadimos unas buenas dosis de humor y unos empresarios atrevidos que se estrenan en este su primer proyecto, el resultado es un aterrizaje destornillante en una pista repleta de sorpresas y una tripulación que no deja indiferente. Sobre el escenario, un cartel de caras reconocidas y especialmente queridas.
El texto, escrito y dirigido por Begoña Alberdi y José Vicente Pestana cuenta, además de las actuaciones de los creadores, con las interpretaciones de la maravillosa Brigitta Lamoure y Reyes Ventós. El reparto lo completa al piano en directo la música de Josep Buforn.
Begoña Alberdi nos emociona porque inevitablemente nos recuerda todo lo bueno que saco de nosotros durante el largo encierro de la pandemia. En marzo del 2020, desde la ventana de su piso de la calle Calabria de Barcelona, al que se había mudado hacía apenas un mes, la diva apagó las luces del comedor y en la penumbra empezó a cantar al patio inside. Aquel O mio babbino caro de la ópera Gianni Schicchi de Puccini se convirtió en un emblema, sus recitales en un ritual todas las tardes y la artista en una cantante especialmente querida por los barceloneses.
En esta disparatada comedia Begoña Alberdi canta y actúa, tras haber escrito y dirigido la pieza con José Vicente Pestana, un psicólogo, actor y dramaturgo, especialmente interesado en explorar las tensiones entre identidad y autenticidad en el mundo teatral. Un estudio que transporta en este montaje.
Entre la disparatada tripulación destaca Brigitta Lamoure, artista emblemática de la escena catalana, esta mujer de espíritu crítico y contestatario se estrena en la faceta de empresaria en un proyecto en el que se atreve con todo, el cabaret, el cuplé y la improvisación en las butacas de platea, tradición aprendida en sus noches de estrella del Molino. La actriz, cantante y bailarina Reyes Ventós se pone al frente del elenco, como productora y actriz, donde explora sus años de experiencia internacional como artista de musicales y bailarina.
Nada más llegar al teatro, los viajeros descubren que su vuelo ha sido cancelado. Para matar el tiempo, un equipo de cocineros al mando de Ernesto Ventós arranca con la primera parte del espectáculo. Este chef barcelonés polifacético, empresario y organizador de múltiples eventos relacionados siempre con la gastronomía, se pone a los mandos de los fogones con propuestas que sorprenderán a los comensales, que son retados a explorar sabores y a jugar con los olores, elemento imprescindible siempre que hay integrantes de la familia Ventós en el proyecto.
Tras una primera hora en que sabores y olores escancian el buen humor de los asistentes, comienza la obra de teatro. El viaje en avión se ha cancelado y así como perdemos las maletas, en esta representación la tripulación invita a perder los miedos y atreverse con esas aspiraciones que en algún momento de nuestras vidas las creímos perdidas.
El espacio acompaña. La casa Villa Mayfair, en la Vía Agusta de Barcelona, acoge a los comensales en ese viaje sensorial, gustativo y disparatado. Un menú completo de Navidad.