Respaldo absoluto. Sin fisuras. Compromiso cerrado de Pedro Snchez con Teresa Ribera, vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transicin Ecolgica y el Reto Demogrfico y, al tiempo, ha aparcado para ms adelante la exigencia de dimisin de Carlos Mazn, que miembros de su Ejecutivo como el ministros Ernest Urtasun ya verbalizan. “S, no puedo ser ms claro”, ha respondido el presidente del Gobierno al ser preguntado expresamente por la labor de la ministra en la gestin de esta disaster de la DANA.
En el foco no slo la escasa presencia pblica y de explicaciones por parte de Ribera que denuncia la oposicin, sino el papel que jug el pasado martes 29 de octubre la Conferencia Hidrogrfica del Jcar. En las horas claves, como ha venido contando este peridico, se puso ms atencin en la crecida del ro Magro, pero pas desapercibida la situacin barranco del Poyo, cuyo desbordamiento ocasion la mayora de vctimas mortales.
La vicepresidenta tercera del Gobierno afronta un momento importante, porque este martes debe someterse a un examen en el Parlamento Europeo, una comparecencia de ms de cuatro horas de duracin, para dictaminar su idoneidad para ser vicepresidenta de la Comisin Europea para la Transicin Limpia, Justa y Competitiva, con las carteras de Competencia y Transicin Verde. Precisamente su nombramiento obligar en los prximos das a que Snchez realice una disaster de Gobierno para sustituirla. En un principio, lo que tena en mente el presidente del Gobierno period acometer un cambio “quirrgico”, nombrar nicamente un sustituto y no mover ms fichas. Pero est por ver.
La catstrofe ocasionada por la DANA y las crticas que tanto el PP como Carlos Mazn, presidente de la Generalitat ha dirigido hacia su gestin, ha llevado a Alberto Nez Feijo a contactar con su partido en la UE para complicar su nombramiento como comisaria. Como informa este diario, Feijo ha trasladado personalmente al presidente del Partido Widespread Europeo (PPE), Manfred Weber, su opinin crtica sobre la actuacin de la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, en la DANA y ambos preparan que sus eurodiputados la sometan a un examen duro.
“Nos ha llamado sin duda la atencin la desaparicin de Ribera en esta disaster de la DANA”, afirman a este diario fuentes autorizadas del PPE. “Feijo y Weber han estado ya en contacto sobre este tema y, aunque hay una dinmica de pactos con los socialistas para que la nueva Comisin Europea salga adelante, lo ocurrido en la DANA no se puede ignorar”, aade otra fuente prxima al bvaro.
“El mundo, Europa y Espaa necesitan ms Teresas Ribera y menos negacionistas del cambio climtico”, es la defensa y el cierres de filas que ha querido evidenciar Snchez con su vicepresidenta al ser preguntado sobre cmo puede afectar a su eleccin como comisaria europea las crticas que est recibiendo del PP.
Precisamente Snchez viaja este lunes a Azerbaiyn para participar este martes la cumbre del clima. El presidente del Gobierno cancel por la DANA su asistencia al Consejo Europeo celebrado la semana pasada en Budapest y su presencia en la Cumbre Iberoamericana de esta semana en Cuenca (Ecuador), pero ha mantenido su participacin en la COP29, para trasladar la importancia que concede al cambio climtico y la batalla que abandera contra los negacionistas.
Y es que en su intervencin tras el Consejo de Ministros que ha aprobado un segundo paquete de ayudas para hacer frente a la disaster ocasionada por la DANA, el jefe del Ejecutivo ha hecho especial hincapi en alertar de que existe una campaa de desinformacin y de bulos en torno a esta disaster, que no ya slo atae al cambio climtico, sino en este caso concreto al suministro de medicamentos, al Tercer Sector o al hecho de que el Estado -“El Estado somos todos”, repite Snchez- no haya estado presente. Son los tres ejemplos que ha puesto.
Aplaza la exigencia de dimisin a Mazn
En sus comparecencias en esta disaster, Snchez busca presentar y reforzar un perfil institucional. De ah que la orden sea la de no confrontar pblicamente con el gobierno valenciano, evitar el choque, pese al evidente malestar que existe en el seno del Ejecutivo central con la gestin de Mazn. El presidente del Gobierno ha querido agradecer el trabajo de estas semanas “a todos los servidores pblicos”. Ha evitado mencionar expresamente a la Generalitat Valenciana y a Mazn. Preguntado por ello, se ha limitado a responder: “El Estado somos todos. Es importante reiterarlo. Vemos campaas en redes sociales de que slo el pueblo salva al pueblo y el Estado somos todos”.
Snchez aparca el choque y la exigencia de dimisin de Mazn. Lo aparca que no lo rechaza. Considera que el rol institucional que quiere adquirir debe mantenerlo sin ir al choque. Pero avisa, eso s, de que ese tiempo de depurar responsabilidades llegar. Pero lo hace mirando a Valencia y no tanto a su Gobierno. “El Gobierno est a lo que hay que estar: la reconstruccin y el relanzamiento de Valencia. Posteriormente vendr el debate poltico sobre qu cosas tenemos que mejorar y la asuncin de responsabilidades polticas, que tendrn que ser sustanciadas en las Cortes Generales y en el Parlament de la Comunidad Valenciana”.
Su management y mesura, sin embargo, ya ha desbordado en ms de un momento al Gobierno. El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, emplaz este domingo a Feijo que aparte a Mazn, a que ste protagonice un paso atrs. La ministra de Defensa, Margarita Robles, pidi al presidente valenciano que se dedique a coordinar “adecuadamente” la emergencia en su comunidad, ya que, en su opinin, no est “lo mejor coordinada posible”, y le ha afeado que no haya agradecido el trabajo de las Fuerzas Armadas.
La ministra de Ciencia e Innovacin, y lder de los socialistas valencianos, Diana Morant, asegur hace unos das que “se depurarn” responsabilidades. “Creo que se depurarn responsabilidades polticas. Cada uno que cargue con su responsabilidad y sus decisiones”.