UGT Andalucía nació el 12 de enero de 1979. Un momento histórico marcado por la Transición, con la Constitución recién aprobada, y con una tierra que ansiaba su autonomía política. Fue un período de esperanza y transformación, en el que trabajadoras y trabajadores andaluces buscaron construir una organización sindical fuerte, que luchara para dar respuesta a las profundas desigualdades sociales y económicas que afectaban a nuestra región. Como organización, UGT tenía ya 89 años de lucha en defensa de la clase trabajadora, pero su estructura, compuesta por sectores muy fuertes, como la imprenta, la enseñanza, la minería o el ferroviario, entre otros, y con algunos sindicatos provinciales, no contaba con el resurgimiento de una identidad andaluza que demandaba poder autonómico. Y ese poder político, también tenía que ser sindical.
Por ello, nuestra lucha y nuestro compromiso han sido siempre, y siguen siendo, los andaluces y las andaluzas. Y por nuestros principios, en especial, las personas trabajadoras, los jóvenes, las mujeres, los inmigrantes, las familias en riesgo de exclusión social y los colectivos vulnerables.
Nunca olvidamos la historia de nuestra organización y las decenas de miles de víctimas andaluzas de la dictadura, muchas de ellas ugetistas, aún enterradas en cunetas o en fosas comunes, por lo que nuestra exigencia de verdad, justicia y reparación, forma parte de nuestra esencia y reivindicación, para que se lleven a cabo todas las actuaciones en materia de Memoria Democrática, y esa ha sido también nuestra bandera estos 45 años.
Para poner en valor todas esas actuaciones, UGT Andalucía cuenta con un archivo histórico, que gestionamos a través de la Fundación por el Desarrollo de los Pueblos de Andalucía, FUDEPA, con sede en Córdoba. Me siento orgulloso de presidirla, y también del trabajo y de la historia de este sindicato que ha contribuido, de forma decisiva, a la consolidación de nuestra democracia, y al desarrollo de nuestra autonomía.
UGT Andalucía ha dado respuesta a las profundas desigualdades sociales y económicas que afectaban y aún afectan a nuestra tierra. Hemos creado espacios para avanzar en derechos laborales y sociales, y en la mejora de los servicios públicos: sanidad, educación, cultura, dependencia, infraestructuras. Hemos impulsado y realizado propuestas a cientos de leyes que han mejorado la vida de la población andaluza. Participamos en el Consejo Económico y Social de Andalucía, en el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales, en el Instituto de Prevención de Riesgos Laborales; como miembros del Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos hemos conseguido acuerdos que han evitado 50 millones de horas de huelga. Pero cuando no es posible el acuerdo, la movilización está también en nuestra naturaleza.
Y en los momentos más difíciles y críticos, UGT Andalucía siempre ha estado con la ciudadanía andaluza. Por ejemplo, durante la pandemia cuando, como servicio esencial, atendimos 900 mil consultas telefónicas, presenciales o por mail, sobre cómo aplicar las medidas que se estaban tomando en materia laboral y de prestaciones, como los ERTE o, incluso, de movilidad, en el confinamiento y en los períodos de desescalada.
Nuestro objetivo más inmediato es la implantación de la jornada semanal máxima de 37 horas y media. Pero hay que recordar que, en 45 años, hemos formado parte del logro de la mayoría de los derechos de los que hoy disfrutamos: vacaciones, permisos, Ingreso Mínimo Important, pensiones, prestación por desempleo, planes de igualdad en las empresas, planes de prevención de riesgos laborales, medidas de acceso a la vivienda, atención a las personas con discapacidad, protección al medio ambiente…
Hemos firmado miles de Convenios Colectivos, de los que hoy hay vigentes 700, que amparan a un 1.700.000 trabajadoras y trabajadores andaluces. Son derechos que hay que seguir peleando día a día, porque hay intereses muy poderosos, que pretenden destruirlos.
En este 45º aniversario miramos al futuro con renovada energía. Los retos de transición digital y social, la lucha contra el cambio climático, y los nuevos derechos laborales demandan un sindicato más activo y preparado que nunca.
Cumplir 45 años es un motivo de celebración, y también una oportunidad para refirmar nuestro compromiso en los valores de igualdad, respeto y solidaridad, que representan a UGT Andalucía.